Conjunto de dos cuadros cuadrados y abstractos que combinan tonos suaves y texturas etéreas. Uno presenta una escena brumosa con un toque cálido de luz naranja en el horizonte, mientras que el otro muestra una mezcla de tonos tierra y blanco que evocan la naturaleza en calma. Ideales para generar serenidad y sofisticación, este conjunto combina perfectamente con decoraciones en tonos verdes, beige y grises.